Criterios de corrección del comentario sobre la intromisión
del Ejército en la vida política (opción B junio)
Introducción: función del Ejército -> defensa frente a
amenazas exteriores. La historia nos dice que si dirige su mirada al interior
no puede pasar nada bueno, ya que su dominio aplastante de la fuerza frente al
resto de la sociedad hace que tienda a imponer su forma de Estado al resto.
Desarrollo y temas:
- Inicio de los problemas: Fernando VII (shocking!!). Su Restauración brusca y sin ningún tipo de integración del liberalismo hace que uno de los mecanismos de salida de las reivindicaciones liberales sea a través de rebeliones militares (doc 1).
- Una de ellas triunfa (Riego) y desgraciadamente crea escuela. A partir de ahí, cuando las diferentes facciones liberales quieran llegar al gobierno, llamarán a la puerta de los cuarteles (doc 2).
- A lo largo del reinado de Isabel II existirán campeones de cada facción (espadones) (citar aquí diferentes ejemplos: La Granja, Vicalvarada, La Gloriosa), pero en el Sexenio Democrático se producirá un cambio relevante: el cantonalismo pondrá en cuestión la unidad de la patria y “derechizará” al ejército, que de la Restauración en adelante defenderá opciones conservadoras o reaccionarias, sin necesidad de pronunciamientos al actuar como tuteladores del sistema imponiendo su voluntad (jurisdicciones, Juntas de Defensa) (doc 3).
- Esto, por supuesto, hasta que el Estado decide dejar de tutelarse, con lo que llega el golpe de Primo de Rivera, que directamente asumirá el poder sin apoyarse, como hasta el momento, en una facción determinada: se pasa del espadón al dictador (ni caso a lo que dice en el texto) (doc 4).
- Tras el fracaso final, la II República tomará varias medidas para eliminar el golpismo del ADN militar, pero no sabrán o no podrán hacerlo del todo, lo que culminará en el golpe del 18 de julio, tras el cual el Ejército tomará el poder directamente y sin disimulos durante cuarenta años (doc 5)
Conclusión: el papel del Ejército es absolutamente central
en la historia contemporánea española. Aparentemente, tras el vodevil del 23F y
una purga de elementos subversivos bastante más efectiva que la de la II
República, el germen del intervencionismo ha desparecido del Ejército español.
O eso esperamos…
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